Puede que el título sea un poco exagerado porque, naturalmente, en un crucero importa mucho el recorrido y los lugares en los que se para, aunque solo sean unas horas, para visitarlos. Pero también es verdad que los atractivos que ofrece el propio barco sean una dura competencia al centro histórico de las ciudades o a las playas de fina arena y aguas trasparentes.
Por otra parte, en esta época del año muchos grandes navíos ofrecen largas travesías en las que el único y maravilloso espectáculo es el mar. Son esos que finalizan su temporada de primavera/verano en el Mediterráneo y el Adriático y se trasladan al continente americano para recorrer con buen tiempo el Caribe y partir hacia nuevas latitudes más al sur. Estas travesías del viejo al nuevo continente (y al revés cuando llega la primavera), con varios días de navegación son cada vez más aprovechadas por un creciente número de cruceristas.
Algunas de estas navieras, las más impresionantes, incluso darán comienzo a sus tentadoras propuestas de vuelta al mundo que en muchos casos se inician a principios de año. Curiosamente, en proporción, son relativamente baratas. Por ejemplo, la vuelta al mundo que propone Princess Cruises en su barco Island Princess, de 118 días de duración con salida desde Los Ángeles el 20 de enero de 2025 cuesta a partir de 20.338 euros, lo que equivale a unos 172 euros por día, como un hotel de cuatro estrellas con solo alojamiento y desayuno. Teniendo en cuenta que a bordo se ofrece pensión súper completa con decenas de restaurantes para elegir, piscinas, casino, tiendas, shows destacados y muchos otros atractivos y que la travesía permite visitar 6 continentes, 51 destinos, 26 países y 27 lugares Patrimonio de la Humanidad, es un chollo. Así se explica que cada vez más gente, entre ellos muchos españoles, se animen a hacer estos largos viajes de lujo.
Con todo detalle
Algunos cruceros tienen atenciones y servicios similares, pero hemos elegido éste de Princess Cruises porque es uno de los más recientes, botado hace apenas unos meses. La experiencia con el Sun Princess, el último de la veintena que tiene la compañía, llama la atención por los detalles grandes y pequeños que ofrece al viajero. Sun Princess es el buque más impresionante, lujoso y asombroso jamás creado, con espacios amplios pero íntimos, con The Dome, una innovadora estructura geodésica acristalada en la parte superior del barco inspirada en las terrazas de Santorini. Tiene capacidad para 4.300 pasajeros en 2.157 cabinas, 80 de ellas suites, con una tripulación de 1.600, de 57 nacionalidades que hablan 27 idiomas, y casi 180.000 toneladas con 345 metros de eslora (como casi cuatro campos de fútbol seguidos), es el primer barco de Princess que funciona con Gas Natural Licuado, de combustión más limpia, que reduce significativamente las emisiones atmosféricas y el gasóleo marino para minimizar la huella medioambiental.
Aunque por supuesto hay suites de hasta 120 metros cuadrados con todo tipo de lujos, también la mayor parte de los camarotes que tiene cuenta con terraza en la que poder desayunar, cenar o simplemente relajarse con total privacidad para leer o contemplar el cambiante mar. Además, hay un gran televisor de pantalla plana, frigorífico, sábanas de algodón, edredón de plumas, zapatillas y albornoces de rizo… pero lo que lo hace diferente son los pequeños detalles. Por ejemplo, hay unas luces bajas indirectas en las mesillas y en el baño que se encienden automáticamente al levantarse por la noche, o una tontería bien pensada, el botón para “tirar de la cadena” (aunque ya no existan esas cadenas) que siempre recomiendan pulsar con la tapa del inodoro bajada, está justo detrás de esa tapa cuando está abierta, así no queda más remedio que bajarla antes de pulsar. Una chorrada, ya sé, pero indica que han pensado en todo.
También en la higiene y la seguridad. Naturalmente hay un enorme restaurante buffet que lleva el apropiado nombre de The Eatery, con una selección interminable de platos de todo el mundo, panes recién horneados y comidas regionales, en un ambiente informal durante el desayuno, el almuerzo o la cena, pero todas las comidas a la vista están separadas de los comensales por cristales y hay que pedirlas a los camareros, así no solo se mantiene la higiene en los alimentos, también seguramente se desperdicia menos comida. Los platos son de cerámica y las copas y vasos de cristal con lo que el uso de plásticos es mínimo.
Para que todo sea más fácil Princess ha introducido el OceanMedallion ™, un dispositivo portátil del tamaño de una moneda que permite hacer de todo, desde el embarque sin contacto, apertura automática de la cabina al acercarse a ella y pago sin efectivo ni tarjeta, hasta la ubicación de los seres queridos en cualquier parte del barco, así como un servicio mejorado detectando donde se está en cualquier lugar del barco para servir lo que se desee.
Razones para disfrutar a tope
Como decimos al principio, este barco ofrece tantas ventajas que dan ganas de quedarse en él durante toda la travesía, aunque, naturalmente, poca gente lo hace. Aquí mencionamos diez buenos motivos para disfrutar del Sun Princess y de otros barcos de la compañía con similares servicios.
Ver cine sin salir de la piscina. Hay cinco piscinas de tamaño medio en distintas cubiertas del barco, alguna de ellas reservada, con cómodas butacas y tumbonas donde tomar el sol, con bares y cócteles de lujo, pequeñas opciones gastronómicas y en una de ellas, el Lido que en realidad son dos piscinas, se puede disfrutar con Cine bajo las Estrellas donde ver películas, actuaciones musicales o deportivas y otros espectáculos en cualquier momento del día o de la noche. Naturalmente no faltan las palomitas, gratis, claro. El tamaño relativamente reducido de las piscinas permite tener siempre tumbonas disponibles y espacios sin agobios. Además, hay una decena de jacuzzis para cuatro o seis personas, situados en el borde de las cubiertas con impresionantes vistas al mar. En The Sanctuary, en la cubierta más alta del barco, se puede tener piscina privada y un retiro sólo para adultos y empaparse de relajación, mientras se disfruta de una bebida exclusiva o te relajas con un masaje al aire libre.
Tomar una margarita de aperitivo y una piña colada de postre. La opción de bares y bebidas en este barco es casi infinita, hay una docena de bares para elegir y también decenas de cócteles sencillos o sofisticados. En las cubiertas y cerca de las piscinas en un ambiente completamente relajado se puede pedir una refrescante cerveza o un interesante cóctel entre baño y baño o mientras se toma el sol, hay cinco bares para elegir con atentos barmans y camareros. Estos son algunos: el Cascade, situado en The Dome, una zona cubierta con espectaculares vistas panorámicas; el Crooners propone música de piano en directo, un ambiente tranquilo y formal para mantener una conversación o para sentarse y disfrutar de suaves melodías; Wheelhouse en la cubierta 7, al lado del Horizons Dining Room, con un ambiente sofisticado y cuidados detalles, es punto de encuentro perfecto donde pedir la bebida favorita mientras se espera a alguien para cenar… y aún quedan algunos más para explorar.
Dar un paseo por la gastronomía del mundo. En el Sun Princess hay nada menos que 29 opciones gastronómicas para elegir, algunas están incluidas en el precio del crucero y otras requieren un pago extra. Muchas de ellas son con turno libre que permite a los pasajeros cenar cuando y con quién deseen, entre las 17:30 y las 22:00 sin necesidad de reservar. Los espacios más habituales son el mencionado The Eatery, un generoso buffet que reúne gastronomía de todo el mundo, destacando la italiana, mexicana y china, con más de un centenar de propuestas que cambian a lo largo del día. También el Horizons Dining Room un restaurante de tres pisos con menú a la carta con cinco o seis opciones para elegir primero, segundo y postre, un ejemplo puede ser: Crab Seafood Cocktail de primero, Braised Short Ribs de segundo y New York-Style Cheesecake como postre, pero hay mucho donde elegir. También hay restaurantes especializados e informales como Alfredo´s Pizzeria, especializado como es obvio en pizzas y comida italiana, O´Malley´s, un típico pub irlandés y otros muy exclusivos, como The Catch by Rudy especializado en mariscos y pescados, The Butchers table by Dario, con el carnicero más famosos del mundo, Dario Cecchini, donde se sirve un paraíso carnívoro desde tartar y carne marinada al mejor entrecot o solomillo Wagyu o, el Kai Sushi, exquisitamente decorado, con especialidades en mariscos, ostras y sushi y sashimi, además de rollitos de autor como Tempura de bogavante crujiente, Tataki de wagyu y Espárragos y salmón, y Umai Teppanyaki/Hot pot, exclusivo del Sun Princess, un festín para los sentidos, que ofrece una fusión de alta cocina y espectáculo donde maestros altamente cualificados de teppanyaki toman el centro del escenario, utilizando sus habilidades de fuego y estilo para crear un espectáculo deslumbrante.
Hacer ejercicio para bajar la comida. Es un hecho que en la mayoría de los cruceros se engorda un par de kilos, la buena y abundante comida y la vida sedentaria tienen la culpa. Por eso no es mala idea hacer ejercicio durante la travesía. El Sun Princess Fitness Center está ubicado en la cubierta 18, y equipado con equipos de última generación y también proponen clases de fitness, aulas y espacios para yoga, pilates y mucho mas. Pero después del ejercicio hay que relajarse y para ello nada como el vecino Lotus Spa en dos plantas, elegido como «Mejor Spa en un Crucero» por Spafinder Wellness 365™, que ofrece una variedad de tratamientos, desde faciales, masajes terapéuticos con piedras, a una suite termal para aromaterapia. También es el lugar adecuado para arreglarse para una noche de gala en la peluquería, que incluye tintes, cortes para hombre y afeitados, manicura, pedicura y blanqueamiento dental.
Disfrutar un musical, teatro, circo… cada noche. El nuevo barco de Princess Cruises ofrece cada noche entretenimiento espectacular en espacios completamente nuevos. El Princess Arena es el teatro más avanzado tecnológicamente, tiene tres configuraciones para maximizar las líneas de visión y ofrecer una experiencia realmente cautivadora. Creadas por algunos de los directores y coreógrafos más conocidos del mundo, sus dinámicas producciones transportan a lugares exóticos. Shows imaginativos creados a bordo, clásicos de Broadway con asombrosas puestas en escena, artistas de todo el mundo, las canciones más conocidas y los clásicos de siempre, canciones populares y números originales, realizados por algunos de los mejores actores y bailarines del mar. Comedia mágica, cantantes, músicos, malabaristas, acróbatas y mucho más. Con una piscina a la luz del sol y un escenario para espectáculos a la luz de las estrellas, la cúpula acristalada, inspirada en las terrazas de Santorini, ofrece espectáculos acrobáticos creados en colaboración con el renombrado Cirque Éloize canadiense. En determinados cruceros se organiza una fiesta temática Princess en lo que se llaman Festivales del Mundo que incluyen fiestas y bailes, música animada y actuaciones folclóricas, actividades enriquecedoras, películas temáticas y compras especializadas. Desde el Oktoberfest hasta el Carnaval de Río, los Festivales del Mundo son un acontecimiento de gala exclusivo de Princess.
Elegir entre las grandes marcas que ofrecen sus tentaciones. Las tiendas de Princess ocupan más de 1.500 metros cuadrados de espacio comercial, repartidos en dos cubiertas, sin los límites tradicionales, creando áreas abiertas y espaciosas para el descubrimiento de las propuestas. Las tiendas interactivas y los locales pop-up también añaden una experiencia comercial atractiva y emocionante con una selección de más de 200 marcas de primera calidad, desde joyería y relojería hasta moda, gafas, belleza, vinos y licores, regalos, aperitivos, bienestar y accesorios y todo ello libres de impuestos (las tiendas solo están abiertas cuando el barco navega). Están presentes grandes marcas como TAG Heuer, Breitling, Shaun Leane… y las mejores marcas de cosmética y cuidado de la piel del mundo, como Chanel, Dior, Lancôme, Estee Lauder, Clinique… El Sun Princess también presenta más de 25 marcas nuevas en el mar, como Chanel No. 1, Beyond Yoga y Varley, la moda sostenible de Neu Nomad y la elegancia italiana de los bolsos Pinko. Además, se estrena a bordo la primera boutique de productos de la marca Princess, Waves, que ofrece una exclusiva colección limitada Princess Inaugural, que celebra el icónico nuevo barco, así como nuevas líneas con la Princess Seawitch. Curiosamente, también hay un espacio para piezas de segunda mano de grandes marcas, como Rolex y accesorios de lujo de Chanel, Louis Vuitton, Gucci y joyería Pandora.
Tener suerte con «Rien ne va plus». Situado en la cubierta 8, junto a la bulliciosa Piazza, el Princess Casino ofrece un gran espacio para entretenimiento y comodidad para todo tipo de juegos. El Casino es un espacio imprescindible en todos los cruceros y el que ha diseñado Princess para este barco es extraordinario. Tiene un 50 % más de espacio y un 30 % más de máquinas que los otros barcos de la Royal Class. Con 227 máquinas de tragamonedas y nuevos y populares vídeo póquer, Princess Casino cuenta con 13 juegos de mesa en vivo que ofrecen blackjack y póker progresivos, y diversos juegos de cartas con apuestas, según las normas de Las Vegas. Todo ello con cómodos asientos para pasar largas horas si el bolsillo y la suerte lo permiten. Y, naturalmente no faltan las mesas de ruletas y dados en la versión americana.
Participar en festivales de vino, cerveza y más. La última tendencia en entretenimiento informal es un Festival de cerveza y vino que se celebra dos veces en cada crucero de más de siete días. La cubierta superior se transforma en un animado mini-festival que muestra cervezas regionales y vinos, siempre con música en vivo. Se pueden visitar las distintas propuestas al aire libre tomando una copa de vino o una cerveza artesana fría en medio de actuaciones de música en directo, mientras se disfruta de la compañía de expertos en esta popular experiencia. También en el Bar Crooners se recuerda la clásica época de Sinatra, de la mano de un pianista de primera clase. La atmósfera «Rat Pack» donde probar el famoso menú de martinis de firma, bebidas mixtas de la vieja escuela, daiquiris escarchados, margaritas y piñas coladas. Los expertos mixólogos, con el popular Rob Floyd al frente, impresionan con su destreza para hacer cócteles y degustaciones de tequila y whisky. Y para los amantes del chocolate, el maestro Norman Love, ha diseñado algunos de los más deliciosos platos en exclusiva para Princess, que se pueden elegir en los postres del menú, como: «Chocolate Journeys SM», en el Restaurante principal y en el Horizon Court. El chef Love, ha estudiado en Francia y está reconocido como uno de los mejores chocolateros del mundo. Combina chocolate premium con sabores únicos y diseños artísticos para obtener una experiencia culinaria inigualable.
Sorprenderse con momentos especiales. Las travesías de Princess siempre ofrecen momentos especiales que añadir a la larga colección de experiencias mencionadas. Por ejemplo, hay una galería de arte a bordo y excitantes subastas que dan la oportunidad de ver y pujar por una amplia gama de arte, incluyendo piezas de artistas famosos. Un lugar especial es Spellbound by Magic Castle, con su ornamentada decoración que incluye artefactos mágicos, curiosidades de época y efectos especiales interactivos, Spellbound está meticulosamente diseñado para captar la esencia del exclusivo Magic Castle de Hollywood, donde la magia ha dejado hechizado al público durante décadas, y combina el cautivador mundo de la magia con el arte de la coctelería para crear una extraordinaria experiencia de inspiración victoriana, donde poder disfrutar de increíbles hazañas de magia de magos con talento, (en este caso, dos españoles), sorpresas en salas temáticas y cócteles teatrales realizados por servidores prestidigitadores. Y en las noches despejadas, gracias a la colaboración con Discovery Communications™ se ofrecen enseñanzas para el avistamiento de estrellas en cubierta. Y para los que no pueden desconectar del todo de su día a día, el Internet Café, lleno de ordenadores y abierto las 24 horas del día, permite acceder a internet a través de un mejorado servicio de wifi. La biblioteca está repleta de libros, la mayoría en inglés, muchos relacionados con el itinerario del barco y también con clásicos y best sellers.
¿Qué hacer con los niños? Para las familias con niños y jóvenes hasta 18 años, Princess hace fácil navegar juntos, tiene camarotes para familias con ahorros sustanciales en el 3º y 4º pasajero. También hay camarotes conectados entre sí, así como suites familiares con dos camas de matrimonio, con capacidad de hasta 8 pasajeros, y que ofrece más espacio, un balcón y dos baños, incluyendo una bañera. Y para tenerlos entretenidos a bordo, está The Treehouse, para niños de 3 a 7 años, un espacio temático inspirado en un bosque donde podrán bailar, hacer una fiesta de pijamas con películas, crear proyectos artísticos como muñecos Animal Planet™ o competir en un concurso de Lego®. Para niños entre 8 a 12 años, The Lodge mantiene a los niños entretenidos con juegos, bailes y competiciones olímpicas especiales para ellos. También pueden tener la mente ocupada con el California Science Center, programas como escalada o explorar el espacio exterior con Stargazing. Eventos excitantes como shows de talento, noches temáticas y búsquedas del tesoro, animan a los pequeños a hacer nuevos amigos. Para los adolescentes de 13 a 17 años The Beach House permite conocer gente con una noche de cine, clases de hip hop, competiciones de videojuegos o deportivas, como el baloncesto. Y para toda la familia en la última cubierta del barco, está Park 19, un espacio en el que todos pueden disfrutar juntos, repleto de actividades para los más valientes con pasarelas con cuerdas, miradores de cristal para asomarte al vacío, tirolinas, rocódromo y área de chapuzón para toda la familia.
Y, además. Aunque al principio decíamos que estas eran propuestas sin pisar una escala, naturalmente, nadie lo hace. El Sun Princess ofrece travesías muy tentadoras en las que, además de disfrutar de todo lo que el barco ofrece, se pueden descubrir lugares muy interesantes. Desde octubre a marzo se proponen diversos cruceros de 7 a 15 días por el Caribe, con salida y llegada desde Fort Lauderdale (Miami) y escalas, dependiendo de la duración, en Roatan, Belice, Cozumel, Princess Cays, Amber Cove (R.Dominicana) y Grand Turk. A partir de abril, regresa al Mediterráneo, también con diversos recorridos entre 8 y 22 días. En este último caso la travesía parte de Civitavecchia (Roma) y hace escalas, según el recorrido y duración en lugares tan atractivos como Nápoles, Chania, Estambul, Mikonos, Pireo (Atenas), Santorini, Kotor, Corfú, Messina (Sicilia), Barcelona, Gibraltar, Marsella, Génova y La Spezia, para regresar a Civitavecchia (Roma). Hay precios para todos los gustos, según itinerario, tipo de camarote y fecha, desde 610 euros en el Caribe y 1.018 en el Meditarráneo.
Más información: https://crucerosprincess.com/; https://www.mundomarcruceros.com/
Imágenes: Carmen Cespedosa y Princess Cruise